miércoles, 18 de marzo de 2015

Y yo con estas pintas

Hace unos días que se nos estropeó la cisterna del baño de abajo y dejó de funcionar. Llamé al seguro que me dijeron que en unas horas se pondría en contacto conmigo un fontanero. Y así fue. Tras contarle qué pasaba (o más bien después de no saber contarle qué le pasaba a la cisterna, porque yo no uso ese baño y fue Mihombre el que anduvo lidiando con la susodicha cisterna) quedamos en que viniese hoy a las 15:30.
Todo normal, excepto que mi disco duro se "petó" desde que soy madre y he pasado a tener la memoria de Dory, la pez amiga de Nemo. O sea, tengo memoria pez. Es triste, pero cierto.
Así que estaba yo tranquila, con Retoño encima repantingados en el sofá, solicos los dos, que Mihombre estaba en el trabajo, cuando de repente me timbraron a la puerta y, oh! sorpresa, el fontanero "arrivó" a casa.
Y allí que fui yo a abrir la puerta, sin duchar, con un pijama que tiene todos los colores del mundo y que aun por encima se le añaden regurgitaciones varias del desayuno y comida de ese día de Retoño y con unos pelos de loca de los gatos. ¿Y qué me encuentro al abrir? Pues al fontanero más guapillo que seguro hay en el mundo de las cañerías. Después de ese primer momento de tierra trágame y recordar momentos de mi vida en los que yo me arreglaba y estaba mona, lo juro, lo tuve que llevar a ver el water, esa cosa tan útil pero que ni es bonito, ni decora, ni es erótica ni ná.
Me dieron ganas de enseñarle mi albúm de boda para que viese que no soy un orco, sino un elfo al que pilló en un mal momento.
Y a todo esto lo acompañaba un ruido de fondo de ronquidos de Retoño, que el pobre ronca como si fuera un señor de 80 años.
Lo único que me faltó es que me llamase señora, que menos mal que no ocurrió.
Después de esta visión del ángel de los bidés salí a dar un paseo con Retoño y me encontré un tío gordecho agachado sobre el motor del coche, haciendo que se le bajasen los vaqueros por atrás, dejándose ver la "hucha" llena de pelos.
Y así, con estas dos visiones antagónicas, el día quedó equilibrado.

1 comentario:

  1. me gusta como lo cuentas todo... es espontáneo, sincero y llega al corazón.
    bicos,

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